Blanqueamiento Dental: Mitos y Verdades

El Blanqueamiento Dental es uno de los procedimientos odontológicos con más auge de los últimos tiempos. Cada vez más personas se someten a este tratamiento; pero la mayoría de ellas no entiende muy bien de qué se trata y peor aun, se dejan llevar por los famosos "mitos" que surgen en torno a este procedimiento cosmético.

A continuación voy a desmentir alguno de los mitos y aclarar las dudas más frecuentes que tienen las personas sobre el Blanqueamiento Dental.

Ah... por cierto, tengo la potestad para hacerlo porque soy Odontóloga, don't worry...

El color de un diente viene determinado desde el momento en el que nacemos por la tonalidad del núcleo del mismo (dentina) y por la transparencia y capacidad de refracción de la luz por el esmalte.

El color del núcleo no se altera. Sin embargo, con el tiempo el esmalte se va tiñendo a base de sustancias colorantes como pueden ser el tabaco, el café, el té, las bebidas de cola, el tomate, algunos pigmentos químicos, el uso de determinados medicamentos, etc.

El Blanqueamiento Dental consiste en eliminar del esmalte, por medio de sustancias químicas, todas aquellas partículas que alteran su color original.

Mito: "Los dientes oscuros no afectan la apariencia de la sonrisa".

Realidad: Más del 70% de las personas ven afectada su autoestima a causa de una sonrisa desagradable, provocada por dientes oscuros y/o manchados.

Mito: "Después de un blanqueamiento los dientes quedan más sensibles"

Realidad: En la mayor parte de los pacientes no hay efectos secundarios, pero algunos pueden tener sensibilidad. Esta sensibilidad solo dura unas horas. Para evitar esto, solemos recomendar a los pacientes tomar un antiinflamatorio antes del tratamiento y que comience a usar pasta de dientes desensibilizantes una semana antes del procedimiento. Después del tratamiento el odontólogo suele recetar al paciente Nitrato de Potasio.

Mito: "El Blanqueamiento Dental no dura mucho tiempo"

Realidad: En pacientes que mantengan una dieta libre o sin abuso de sustancias colorantes el tratamiento dura de 1 a 2 años. Los fumadores y/o cafeinómanos y personas que ingieren excesivamente bebidas colorantes (especialmente de Cola) tendrán una duración de tratamiento de 6 a 8 meses. De todos modos se hacen retoques una o dos veces al año sin ningún inconveniente. Si no se retocan, los dientes poco a poco volverán a mancharse.

Mito: "Se debilitan mis dientes y se desgasta mi Esmalte"

Realidad: El agente blanqueador únicamente elimina las manchas que se encuentran en el Esmalte. Sólo cuando se realiza sin control profesional puede provocar la deshidratación de la estructura dentaria, provocando excesiva sensibilidad que podría derivar en una Pulpitis Irreversible y Endodoncia. Por lo tanto, este procedimiento siempre debe realizarlo un odontólogo.

Mito: "Debo mantener mis antiguas restauraciones y coronas dentales"

Realidad: No, no se pueden mantener ya que estas no cambian de color. Si hay restauraciones o coronas en la zona tratada, hay que reemplazarlas tras el blanqueamiento dental, ya que tendrán un color diferente al obtenido y no darán apariencia de naturalidad.

Mito: "La Profilaxis (Limpieza Dental) puede blanquear los dientes"

Realidad: La Profilaxis puede remover las manchas superficiales de los dientes, pero no blanqueará la estructura de estos. Es aconsejable realizarla unos días antes del blanqueamiento.

Mito: "Los tratamientos para blanquear los dientes son poco seguros"

Realidad: Los tratamientos para blanquear son completamente seguros, siempre y cuando sean realizados bajo supervisión de un especialista y se utilicen productos de calidad.

Mito: "Las pastas y enjuagues que se venden en los supermercados funcionan para blanquear los dientes"

Realidad: Los productos de venta para todo público por lo general tienen resultados muy poco visibles y de corta duración. Únicamente los blanqueamientos profesionales certificados que son realizados por el odontólogo tienen resultados muy favorables y de largo tiempo de duración. Los productos que realmente son efectivos no son los que están al alcance de cualquiera en una farmacia o en un supermercado. Ese tipo de productos no tiene ni los agentes o principios activos que empleamos los odontólogos ni las concentraciones adecuadas; por lo que estos productos de venta libre se recomiendan solo para mantenimiento del tratamiento profesional.

Mito: "Debo hacer dieta durante mi tratamiento" 

Realidad: Aconsejamos no consumir bebidas cítricas y alimentos con picantes para evitar sensibilidad. Pero en caso de no cumplir con estas indicaciones no presentaría un problema para realizar el blanqueamiento.

Mito: "Puedo realizarme un Blanqueamiento Dental aunque tenga placa o sarro"

Realidad: No se puede realizar si el paciente presenta esas condiciones. Por lo que primeramente se deberá realizar una limpieza de sarro y profilaxis unos días antes de realizar el blanqueamiento, ya que de esta manera dejaremos la boca apta para realizar el procedimiento.

Mito: "Siempre se obtienen los mismos resultados"

Realidad: De ninguna manera. En cada paciente el resultado es distinto. Incluso en un mismo paciente son diferentes los resultados de cada blanqueamiento.

Mito: "El blanqueamiento con luz es mejor"

Realidad: La luz de las lámparas sólo aceleran el proceso de blanqueamiento; quienes realizan el clareamiento son el Peróxido de Hidrógeno y el Peróxido de Carbamida. El producto trabaja sin luz de manera óptima.

La luz en algunos casos es sólo un elemento de Marketing Odontológico, que no produce un efecto final relevante e incluso puede potenciar la sensibilidad al tratamiento. El hecho que “activen” el blanqueador con una lámpara que da destellos o emite una luz azul, no implica que sea una lámpara que pueda foto-activar el producto.